27 de junio de 2008

Veraneo


(Foto de Alfred Domínguez)

Según el Diccionario de la Real Academia una de las acepciones de la palabra Veraneo es : Sitio donde algunos animales pasan el verano. Vemos en la publicidad y sobre todo en las ciudades que el instinto animal de sus habitantes les lleva a salir como locos hacia el mar, la montaña y yo no soy la excepción.

He preparado la maleta sin mucho cuidado porque no voy lejos, a orillas del Mediterráneo cerca de la sierra de Irta estaré hasta septiembre, y en mi maleta he colocado mis compañeros de veraneo, Luciano G.Egido, Blanchot, W.Benjamin, Compte-Sponville, Piglia, Quignard, Cernuda, Vila-Matas. Espero terminar el estupendo y sesudo estudio de Karen Armstrong "La gran transformación" sobre la era axial y sus pensadores-profetas.

Como siempre me ocurre, demasiado material para combatir la modorra húmeda de la costa peñiscolana, pero me remueven las neuronas y me empuja hacia el escritorio a depositar palabras que alguien leerá en el mar inmenso de significados que es la escritura. Precisamente acabo de leer la novela "Versos de vida y muerte" de Amos Oz que comienza con una colección de cuestiones fundamentales sobre la escritura, con sus personajes imaginarios intercambiando palabras con el autor. En un momento dice el autor:
Escribir sobre cosas que existen,pretender apresar una tonalidad, un olor o un sonido con palabras, es algo parecido a tocar una pieza de Schubert estando Schubert presente en la habitación, tal vez sonriendo con sarcasmo en la oscuridad:
Verde aquí. No hay nadie. Y calma. Un cuervo se congela sobre un poste. Dos cipreses crecen casi juntos. Un tercero crece sol.
Intentaré escribir sobre cosas que existen y también de las que no existen, como aquellas que habían antes de que nos sumergieran en el tiempo, para que la imaginación no se me amodorre durante el verano.

24 de junio de 2008

Cuentos de Luciano G. Egido

Foto de J.Boldt

Yo cuando entro en una librería casi siempre salgo con un libro, es una virtud de las buenas librerías (Valdeska es mi preferida en Valencia) y un desgaste para mi tarjeta de crédito. Así voy depositando libros en una estantería para según como vuela mis preferencias tomo uno de ellos y lo abro. Pueden permanecer años en el estante de la espera, como le ha pasado al recién rescatado de Luciano G. Egido "Cuentos del lejano oeste" adquirido hace cuatro años.
"Cuentos del lejano oeste" es un libro de 63 relatos, cada uno después del título tiene una cita. Es importante tener en cuenta esa trilogia: título, cita y texto. El primero se titula Presente
Cita: "Hoy volví a ser de pronto el que era o el que soñaba ser" (Fernando Pessoa) Relato: Yo, era.

Cada relato va aumentando en palabras: 4, 8, 9, 10, ..... hasta finalizar con uno de 17 páginas. Y los temas, por lo que voy leyendo hasta hoy, son los propios de una sociedad no urbana, un lugar como metáfora del mundo, ese lugar está en la raya de Portugal. La metáfora se disfruta con el leguaje.

Transcribo uno, ahora que vienen días de vacaciones y descanso, que se titula BIOGRAFÍA:

"La creencia de que el trabajo es una virtud ha causado mucho daño" (Bertrand Russell)

Trabajó de sol a sol, toda su vida. Se casó con una mujer brava, que le dio seis hijos y muchos disgustos. Padeció de lumbago, sobre todo a partir de los cincuenta años. Cuando se acercó su fin, tenía las manos escoriadas y la rija le hacía lagrimear con el frío. Según las buenas costumbres, a su debido tiempo, sus seis hijos y la mujer lo enterraron y se sorprendieron de que se resistiera.

19 de junio de 2008

ATARAXIA


"Es la ausencia de inquietud: la paz del alma. Es el nombre griego (especialmente en Epicuro y los estoicos) de la serenidad.

¿Se trata de un estado puramente negativo, como casi siempre se cree? No. Porque lo que se ofrece, en esta ausencia de inquietud, es la presencia del cuerpo, de la vida y de todo, y es la única positividad que vale. La a primitiva no debe engañarnos: la ataraxia no es privación, sino plenitud. Es el placer en reposo del alma (Epicuro) o la felicidad en acto (Epicteto).
Es también una experiencia de la eternidad: <Pues en nada se asemeja a un mortal --escribe Epicuro-- el hombre que vive entre bienes inmortales> Por eso la ataraxia, como experiencia espiritual, es el equivalente de la beatitud en Spinoza, o el nirvana en el budismo" (Andre Comte-Sponville, Diccionario Filosófico)

Al ejercitar
mi cuerpo, en el sofá del que he expulsado a mi gata, en la consecución de ese estado de paz del alma, muchas tardes tengo la impresión de que he provocado en su diminuta almita algún tipo de inquietud que le insta afilar sus instintos homicidas...

16 de junio de 2008

¡Cuidado!


(Via Volcano)

Hoy después de ver Nazarín de Luis Buñuel, al llegar a casa, he buscado un libro de Juan José Arreola que leí hace mucho tiempo. Una escena de la película que hoy me ha llamado mucho la atención es la de la moribunda de la población apestada que ante la insistencia de Nazarín por reconfortarla con la religión le contesta: Cielo no, Juan. No quiere la ayuda de Dios, quiere que esté con ella la persona a la que ama apasionadamente, su Juan. En un mundo de enfermedad y muerte, de violencia y vilezas, únicamente los seres humanos buscan la esperanza en sus seres queridos.

En el libro que tengo del escritor jalisciense "Cuentos fantásticos", con prólogo de Borges fascinado por El prodigioso miligramo, hay un pequeño relato que subrayé en Julio de 1990 , aunque el título haya quedado anclado en un tiempo en el que el año 2000 nos parecía muy lejano: Alarma para el año 2000 su desenlace sigue fresco y vigente.

"¡Cuidado! Cada hombre es una bomba a punto de estallar. Tal vez la amada hace explosión en brazos de su amante. Tal vez...
Ya nadie puede ser vejado ni aprehendido. Todos se niegan a combatir. En los más apartados rincones de la tierra resuena el estrépito de los últimos descontentos.
El tuétano de nuestros huesos está debidamente saturado. Cada fémur y cada falange es una cápsula explosiva que se opera a voluntad. Basta con apoyar fuertemente la lengua contra la bóveda palatina y hacer una breve reflexión colérica...5,4.3,2,1...el índice de adrenalina aumenta, se modifica el quimismo de la sangre y, ¡cataplúm! Todo desaparece en derredor.
Cae después una ligera llovizna de ceniza. Pequeños grupos viscosos flotan en el aire. Fragmentos de telaraña con leve olor nauseabundo como el bromo: son los restos del hombre que fue.
No hay más remedio que amarnos apasionadamente los unos a los otros."

Yo no se si llegaron a conocerse Buñuel y Arreola, pero es muy posible que su pensamiento sobre el ser humano y la sociedad que nos rodea fuera muy semejante y las alarmas en 2008 son las mismas y el remedio el mismo, yo no conozco otro valor compartido por todos.

10 de junio de 2008

La paz perpetua



"The evil that has formed against us has been termed the new totalitarian threat" G.Bush, Berlín 2002

Estos días visita Europa, en plan despedida, el Presidente de los Estados Unidos y al parecer no le preparan manifestaciones en contra porque ya no es un hombre poderoso, es como si ya no hiciera falta manifestar la oposición a sus decisiones más homicidas, o, por así decirlo, las que más muertes de seres humanos inocentes han producido en los últimos años.
Para muchos pensadores-escritores el ser humano es violento por naturaleza y que, como ser social, persigue la paz por exigencias de la razón, lo razonable se impone a lo instintivo. El principal pensador que mantenía esta tesis, creo yo era E.Kant que escribió un pequeño tratado con este título en 1795.
Comienza irónicamente con la alusión a un cartel colocado en un mesón holandés donde aparecía el rótulo de La paz perpetua junto al dibujo de un cementerio.Al leer los artículos, redactados como leyes, para conseguir la paz perpetua entre los Estados que aparecen en dicho ensayo, uno se queda mirando la tapia del cementerio cercano y cree ver, cómo flotando en los tejadillos de los nichos, la mirada enjuta de Kant que sonriente señala el horizonte lejano alcanzable únicamente con el pensamiento.

Los artículos dicen:
  1. "No debe considerarse válido ningún tratado de paz que se haya celebrado con la reserva secreta sobre alguna guerra en el futuro.
  2. Ningún Estado independiente (grande o pequeño, lo mismo da) podrá ser adquirido por otro mediante herencia, permuta, compra o donación.
  3. Los ejércitos permanentes deben desaparecer totalmente con el tiempo.
  4. No se debe emitir deuda pública en relación con los asuntos de política exterior.
  5. Ningún Estado debe inmiscuirse por la fuerza en la constitución y gobierno de otro.
  6. Ningún Estado en guerra con otro debe permitirse tales hostilidades que hagan imposible la confianza mutua en la paz futura, como el empleo en el otro Estado de asesinos, envenenadores, el quebrantamiento de la capitulación, la inducción a la traición, etc."
Es indudable que Mr. Bush no es kantiano pero fue elegido democráticamente y aquí es donde uno echa en falta el poder de convicción de los filósofos contemporáneos en la política, en los medios de comunicación. Al menos se aminoraría el peligro de elegir a personajes funestos como ese empresario del petróleo de Texas que ahora termina su mandato.

¿Podemos permitirnos el lujo de tener políticos que se regirán con principios sofísticos como denuncia Kant: Actúa y justifícalo, Si has hecho algo niégalo, Divide y vencerás, que por añadidura dicen que hablan con Dios?

Yo, como el filosófo de Königsberg, a pesar de todo soy optimista cuando termina su librito así: "Si existe un deber y al mismo tiempo una esperanza fundada de que hagamos realidad ...la paz perpetua, no es una idea vacía sino una tarea que resolviendose poco a poco se acerque permanentemente a su fin (porque es de esperar que los tiempos en que se producen iguales progresos sean cada vez más cortos" (I.Kant, La paz perpetua, Ed. Tecnos, Madrid, 1985)

7 de junio de 2008

El tiempo no marcado


Existe un solo mundo habitado
por los hombres
y esto es más que cierto
un solo mundo, un globo en el cual la cacería al hombre
es el deporte en el que todos están de acuerdo.
No puede ser un puro
acto de maldad
o el deseo impelente
que por fin el sol se apague.
Habrá otro, habrá un porqué
pero sobre ésto los dioses están en desacuerdo.
Sólo por esto han inventado el tiempo,
el tiempo y un puñado de vivientes.
Tienen necesidad de pensar sobre
el porqué, si hubiese un acuerdo
de su crepúsculo no se hablaría más
y entonces
pobres hombres sin dioses ni demonios,
la última, la peor de las infamias.

Escrito por E. Montale en los últimos años de su vida, cuando el poeta ya no necesita explicar su forma de mirar al mundo ni a los que le rodean, pero no puede evitar que su pensamiento quede desnudo de florituras y se exprese en palabras menos misteriosas.
En este poema, que tomo prestado de Ameritalia , el poeta genovés clama por la existencia de dioses y demonios porque sin ellos el ser humano no podría pensar en el tiempo en el único mundo que habita.


1 de junio de 2008

Indulgencia con Seychelles


No recordaba haber estado en aquel templo antes. En el altar mayor un enorme lienzo, de composición piramidal, que representa en el lado izquierdo a los vencedores, rostros de miradas vivas, apuestos caballeros, personaje coronado de altivo mentón, en la parte derecha un montón de cadáveres, semi desnudos, sanginolentos, tocados perfectamente con sus turbantes de colores apagados, con sus torsos desnudos, en la parte central un fraile sostiene una cruz asaetada. Situados a ambos lados de la enorme pintura dos imágenes, del mismo tamaño, primorosamente pintadas, un beato a la izquierda y una virgen con el niño en brazos a la derecha. Todo dispuesto con una simetría perfecta y con la iluminación potente que la ocasión precisaba, nada de sombras ni oscuridades.

La ceremonia larga, amenizada por un coro de 18 personas que cantaban en latín, me resultó triste porque se empeñaban en que fuera alegre, una boda tiene que serlo, pero los cadáveres del lienzo y la mirada tras las gafas negras del beato no animaban a ello. Al terminar la ceremonia el oficiante anunció y leyó una indulgencia de Benedicto XVI lograda por medio del obispo de la diócesis para los novios. Todos saludaron a los padres y recién casados con sonrisas y besos, mientras el cura por el micrófono recordaba que estábamos en la casa del Señor.

En la comida del lujoso hotel, la lactosa del café con leche que había tomado antes de la ceremonia hizo efecto, una molesta inflamación estomacal provocó que los platos se sometieran al estricto veredicto de un comensal molesto, fatal.Al final de la comida, la recién casada, de blanco, feliz nos saludó como es habitual en estos casos. Mi curiosidad no supo callarse y le pregunté a donde iban de viaje de novios, a las Seychelles contestó con sus alegres ojos redondos. Entonces lo compredí todo. Recordé las imágenes del templo, el beato Josemaría y la Virgen Madre de Dios (uno de los misterios más impresionantes del olimpo cristiano) a la misma altura del altar y del mismo tamaño, la mirada tras las gafas de pasta negra y los ojos brillantes de la iluminada señora, la batalla de las Navas de Tolosa, la indulgencia papal.

Afuera en la calle llovía a mares, Zaragoza oscurecía y entonces recordé que en la misma iglesia se casó mi hermano, el padre de la novia, pero entonces en el altar mayor no estaba la imagen del beato de las gafas de pasta negra, al parecer trabajaba para el milagro de unir los paraísos terrenales con la santidad de la vida terrena, lo consiguió.

¿De qué lado están las paradisiacas Seychelles?