3 de noviembre de 2011

Ayer, de camino con P. Handke

Leo estas páginas como quién hurga en una caja de recortes. Peter Handke anota frases en su paseo-viaje que realizó a finales de los ochenta por "su casa", Macedonia, Eslovenia, Croacia,Grecia...y también por otros paisajes de Francia, Turquía, Austria, Alemania, España...
Aquel otro silencio, completo, que se dio (o entró) ayer en el kafeneion, en medio de la Arcadia, en plena tarde, entre los cinco hombres que se habían reunido aquí-allí en torno a la estufa en medio del enorme espacio del café, y además el largo gancho de atizar que estaba sobre la estufa -ya no se oía ni respirar, ni la crepitación de un vestido, ni el de la mujer del fondo- un silencio tan grande entre tanta gente no lo puedo imaginar en "nuestra casa"
Pero también anota letreros que encuentra en su camino, sin comentar nada.
Letrero pegado en la iglesia católica de Nauplion: "1. En esta iglesia se guarda el Santísimo. 2. Es aconsejable no acercarse al perro.
Es todo un ejercicio de creación de un buscador, o como él dice a su paso por Zaragoza: un hurgador.